¿Existe la cubierta perfecta? O mejor dicho, ¿existe la cubierta ideal?
Mi respuesta es siempre la misma: la cubierta ideal es la que se ha estudiado y en la que se han resuelto todos y cada uno de los encuentros.
Quizás por la rapidez con la que se elaboran los proyectos, quizás por la falta de conocimientos técnicos específicos o quizás por la falta de profesionalización del sector de la construcción, se tiende a utilizar muy pocas soluciones para el diseño de las cubiertas. Generalmente se apuesta por los fabricantes de los elementos de cobertura para prescribir o solucionar los diferentes encuentros que se producen en una cubierta. No siendo una mala opción de partida, plantea un error de concepto elemental, y es que el representante de una marca va a tender a solucionar el problema con el material que vende, desechando siempre otras opciones que pueden ser más funcionales.
Si es una cubierta inclinada, el elemento de cobertura más utilizado con mucha diferencia es el panel sándwich metálico. Esta es una magnífica solución, pero tiene sus limitaciones:
– No se puede instalar en una cubierta que tenga curvatura. Hay empresas de montaje de cubiertas que se “atreven” a realizar cubiertas curvas con panel sándwich, esto además de ser una temeridad, supone que el fabricante del material se desentienda por completo en los defectos de calidad que, seguro más pronto que tarde, aparecerán en el panel.
– No se puede utilizar en cubiertas con una pendiente inferior al 5% y es aconsejable que la pendiente sea al menos del 7%. El solape longitudinal del panel no es estanco.
– Para longitud de aguas de más de 15 metros, se ha de realizar un solape transversal “in situ” que es tremendamente delicado de ejecutar y que aconseja aumentar la pendiente de la cubierta hasta el 10%. La verdad es que llevo preguntándome diez años por qué no ha habido un solo fabricante que no haya apostado por solucionar esta importante limitación en fábrica.
– Es un elemento NO TRANSITABLE, con lo que si es una cubierta que va a ser habitualmente transitada, habrá que prever caminos para evitar el deterioro del panel.
– Para cualquier elemento existente en la cubierta se requieren remates de condenación para las aguas, tremendamente delicados y extraordinariamente poco estéticos.
Resumiendo, un buen elemento de cobertura puede perfectamente ser una mala solución de cubierta si no se han diseñado ni previsto sus limitaciones técnicas, que SIEMPRE las hay.
Una cubierta no se puede considerar bien diseñada si no se ha invertido el tiempo suficiente en solucionar todos y cada uno de los encuentros. Dejar esta labor a la empresa constructora o peor aún a la empresa ejecutante es tan irresponsable como ilógico.
Estamos desarrollando un proyecto de ejecución con una cubierta de panel sándwich, que será atravesada en varios puntos por sendos módulos que acogen conductos de ventilación.
Estaría interesado en conocer algo más [fotografías de puesta en obra, unión con los paneles, aspecto final] acerca de los remates de condenación a los que se alude en alguna de las entradas de vuestro blog.
Os doy la enhorabuena por la orientación y el contenido del blog, igualmente, que nos ilustra estupendamente y nos previene frente a indeseados errores de diseño y ejecución.
Muchas gracias y un saludo.
Los remates de condenación en cubiertas, se montan para evitar que el agua se quede estancada en un elemento que corta la escorrentía natural de un panel sandwich (en este caso), de lo que se trata es de que el agua no discurra por ese «canal» del panel sandwich para que esto no suceda, derivándolo a los contiguos. En el caso de que el conducto de ventilación, o el elemento sea mayor que el ancho de un panel sandwich, ya debemos condenar demasiada superficie.
Los remates de condenación se hacen con chapa lisa de acero galvanizada o prelacada dependiendo de las pretensiones. El espesor de estas chapas es variable, pero como mínimo debería ser de chapa de acero de 0,6 mm. Hay que tener en cuenta que esta chapa, para el caso de panel sandwich, suele tener un ancho de 1 m aproximadamente, con lo que cuando suba personal a cubierta (mantenimiento, reparación, instalación), si pisa el remate de condenación la chapa se «abollará».
Con esto, si estamos en fase de proyecto, los elementos que coloquemos, cuanto más arriba mejor para que el agua que derivemos a los «canales» contiguos y sobre todo la dimensión del remate sea menor.
En cubiertas con gran cantidad de elementos, es cuestión de plantearnos si hemos elegido adecuadamente el tipo de cubierta y no deberíamos decantarnos por una cubierta tipo Deck.